La Cumbre Mundial de la Sociedad de la Información y el Rol Futuro de las Cancillerías de América Latina y el Caribe. Por Christian Nicolai

CHRISTIAN NICOLAI
Subsecretario de Telecomunicaciones

17 de octubre de 2005


I.- INTRODUCCIÓN

El cambio histórico que en términos económicos hemos denominado globalización y en el que nos encontramos tratando de acomodarnos, al menos desde los años ochenta, tiene como causa principal y como herramienta indispensable la revolución tecnológica asociada a las tecnologías de información y comunicaciones, que a su vez se sustentan en la digitalización, miniaturización, desarrollo de redes globales, plataformas de aplicaciones, nuevas formas de almacenamiento y procesamiento de la información.

Manuel Castells señala que “Globalización no es sinónimo de internacionalización”, ya que, “En sentido estricto es el proceso resultante de la capacidad de ciertas actividades de funcionar como unidad de tiempo real a escala planetaria.”

En esta sociedad globalizada, la productividad y competitividad dependen de la capacidad de crear conocimiento y procesar información, la que a su vez depende de los niveles de educación, cultura y de la posibilidad de apropiarse de las tecnologías y usarlas, tanto por las personas como por las instituciones y naciones. De este modo, educación e innovación resultan ser pilares fundamentales para el desarrollo de nuestros países.

La revolución digital ha creado nuevas formas de comunicarse, de crear conocimiento, de transmitirlo y de usarlo. La revolución digital ha creado un mundo interconectado, un mundo de redes, donde potencialmente el acceso a la información y el conocimiento deberían ser más fáciles, democráticos y equitativos, creando un entorno con igualdad de oportunidades para todos los seres humanos.

Sin embargo, paradójicamente, gran parte de la población mundial no ha tenido acceso a dichas redes y por lo tanto está excluida de la Sociedad de la Información en que vivimos hoy. Se ha creado una nueva brecha entre ricos y pobres, tanto entre países como dentro de ellos. Esta brecha, que hemos llamado digital, crea una nueva clase de pobres, en que el elemento diferenciador puede ser medido por el acceso al conocimiento, esto es la brecha entre el conocimiento y la ignorancia, entre ricos y pobres.


II.- LAS FUERZAS QUE MODELAN EL MUNDO DE HOY

El mundo actualmente se ve modelado en primer lugar por el fenómeno de la globalización, que es la megatendencia que influye en el resto de los factores.

El mercado, que marca un rol creciente del sector privado, mediante la liberalización del comercio, la desregulación y la competencia global en la economía. Dentro de este contexto se destaca la Organización Mundial del Comercio (OMC) y su participación uniformando el espacio para el desarrollo.

La explosión demográfica en algunos países emergentes especialmente en Asia, que potencialmente incorporan “Tres Millones de Nuevos Capitalistas”, particularmente con India y China, todo esto dentro de un ambiente de creciente movilidad del capital, trabajo, bienes servicios e ideas, pero que excluye a las personas.

Nuevas formas de localización y descentralización, con nuevos jugadores relevantes, por ejemplo, las Organizaciones No Gubernamentales (ONG) y las distintas expresiones de la Sociedad Civil, que plantean demandas crecientes a los gobiernos, con mayores expectativas de los ciudadanos, quiénes exigen más por menos. Ciudadanos que se ven enfrentados a una creciente desigualdad, inestabilidad e incertidumbre, tanto a nivel local como global.

La revolución de las tecnologías de información y comunicaciones que desata todas las fuerzas, posibilitando la existencia de plataformas globales, sustentadas en Internet, workflow, software de código abierto, estándares abiertos, motores de búsqueda, movilidad, conectividad inalámbrica y convergencia de las redes y servicios.

Se modifica la cadena de suministro, que hoy es global, casi en tiempo real, con ciclos de producto, respuesta y obsolescencia cada vez más breves. La producción incorpora crecientemente la externalización y el trabajo colaborativo entre ciudades, individuos y pequeñas y medianas empresas, que actúan globalmente.

El conocimiento juega un rol creciente, creando nuevos servicios e intangibles basados en él. Empujando una revolución en la gestión, incorporando nuevas formas de organización, más planas, ágiles, livianas, en red, extensas, enfocadas al cliente, flexibles y escalables. El foco se radica entonces en las competencias nucleares, introduciendo externalización y asociaciones para el resto. Así las organizaciones se adaptan para la innovación y el aprendizaje en todos los niveles, introduciéndose el concepto de gestión del conocimiento, el cual implica un cambio radical en los procesos y competencias.

En este entorno se espera entonces un sector público moderno, que responda con agilidad y que sea catalizador de los cambios.


III.- PROMESAS Y OPORTUNIDADES

Potencialmente tenemos enfrente un mundo de promesas y oportunidades, ya que, en efecto, la Sociedad de la Información, la Revolución Digital y la Globalización, nos ofrecen:

 Una economía competitiva, basada en el conocimiento e impulsada por la innovación.

 Una economía del aprendizaje, acelerada por redes y por la movilidad.

 En definitiva, un desarrollo Sustentable y amigable con el medio ambiente y una revolución en productividad que nos permitirá una mejor calidad de vida para nuestros ciudadanos.

Podemos observar como, en Irlanda, Finlandia y Corea cerca del 1% del crecimiento de la productividad del trabajo se explica por el crecimiento en la producción de TICs en el periodo 1995-2000; y como en el caso de Estados Unidos de América se estima, entre 1995 y 2002, un aumento en la Productividad Total de los Factores de casi dos veces debido a la incorporación de TICs y a las inversiones complementarias.

Por otra parte, la Comisión Europea en un informe del año 2000 señalaba que en Europa la falta de innovación y uso de las TICs explicaban gran parte del retraso de su crecimiento.

La situación en Latinoamérica y el Caribe no escapa a lo descrito.

Tenemos una oportunidad, pero también una amenaza. Debemos acelerar el paso para acortar la brecha existente.


IV.- LAS TICs PARA EL DESARROLLO

Las TICs deberían permitirnos conectar y dar acceso al mundo rural y a los más pobres a la información crítica, mediante portales con contenidos especializados, aprendizaje y participación. Mediante éstas tecnologías podríamos dar mas poder a las pequeñas y medianas empresas y a las comunidades.

En la educación, salud y seguridad social, podemos avanzar en la igualación de oportunidades sirviéndonos de la tecnología, para la educación continua a distancia; la transformación del proceso de aprendizaje; el acceso a información y servicios; y la transformación de los sistemas de seguridad social.

Asimismo, los gobiernos pueden ser más eficientes, por ejemplo, en sus compras, como es el caso en Brasil, Chile, México y Rumania.

En otros casos se puede profundizar la descentralización como en muchos países de Latinoamérica.

También, mediante e-administración, se puede mejorar la calidad de los servicios públicos, reduciendo los tiempos de respuesta y acercándose a la gente, como lo han hecho Singapur, India y Canadá. En otros casos es posible mejorar el clima de negocios e inversiones, revisando los procesos en aduanas, comercio y puertos, como hizo Singapur, o facilitando el proceso de declaración y pago de impuestos, que es el caso de Chile. En todos los casos con un aumento de la transparencia y auditabilidad de las actuaciones del gobierno.


V.- INTERROGANTES

Frente al mundo descrito, naturalmente aparecen interrogantes, entre otras las siguientes:

 ¿Cómo impactan o impactarán estas fuerzas a nuestras organizaciones y cuál será el rol de los líderes?

 ¿Nos conducirán ellos a un “Mundo Plano” y conectado, o a uno desbalanceado y dividido?

 ¿Cómo usaremos las TICs para el desarrollo?

 En definitiva, ¿cuál es el liderazgo que necesitamos?

También en los países en desarrollo y emergentes, la dinámica global pone la presión en la información y el conocimiento. Por lo tanto, en ellos también, la construcción de capacidad es esencial y la cooperación es clave, no existe una persona capaz de hacerlo todo. Por esto, el liderazgo y las instituciones son igual de importantes que la tecnología.

Asimismo, surgen nuevas necesidades en calificaciones, actitudes, conocimientos y experiencias de las personas y especialmente en los liderazgos. La difusión de las TICs ocurre en “eco-sistemas”, donde el capital social, que enlaza emprendedores, científicos, clientes y gobierno, es fundamental.

El nuevo liderazgo tiene que ver con la capacidad de integrar recursos de conocimientos críticos a las políticas y estrategias, de empresas, instituciones y gobiernos.

El nuevo liderazgo exige nuevos atributos y competencias. En efecto, actualmente a un líder se le piden competencias de red, esto es principalmente robustez, es decir, disponibilidad, confianza, equilibrio, reciprocidad y capacidad de ubicar y acceder a recursos valiosos; y también competencias individuales en calificaciones, actitudes, conocimientos y experiencia.

Entre las calificaciones se piden:

 Fuertes habilidades cognitivas y analíticas, especialmente en el reconocimiento de modelos nuevos y emergentes

 Capacidad de negociación y construcción de consensos a través de fronteras institucionales, nacionales y culturales

 Capacidad para construír equipos y redes de trabajo

 Capacidad superior para encontrar y aprehender conocimiento e información nuevos y necesarios

 Capacidad de emplear nuevas tecnologías de comunicaciones y procesos

Entre las actitudes se consideran necesarias:

 Curiosidad Intelectual

 Empatía y apertura de mente, con un profundo respeto por las opiniones de los demás

 Ambición

 Pasión

 Sólidos Valores

En lo referente a conocimientos se esperan:

 Conocimiento y comprensión de los motores globales y locales del cambio, que están transformando sociedades agrícolas e industriales en sociedades más intensivas en conocimientos

 Conocimiento del “contexto”, que es tanto o más importante que el conocimiento de tecnologías particulares

La experiencia está caracterizada por:

 Trayectorias de carrera que se mueven a través de las fronteras de diferentes sectores, instituciones e incluso naciones


VI.- LA CUMBRE MUNDIAL DE LA SOCIEDAD DE LA
INFORMACIÓN

La Organización de Naciones Unidas, reconociendo la realidad descrita, resolvió, en su Conferencia de Plenipotenciarios de 1998, celebrar una Cumbre Mundial sobre la Sociedad de la Información. Esta Cumbre se realizaría en dos fases, la primera, realizada en Ginebra, entre el 10 y el 12 de diciembre de 2003.

La segunda fase se realizará en Túnez, entre el 16 y 18 de noviembre próximo.

Los actores que deben llevar adelante la cumbre son los gobiernos, el sector privado y la sociedad civil.

La cumbre ofrece una oportunidad para reflexionar, discutir y crear las bases para construir nuestro destino en este mundo interconectado, globalizado e informacional.

Los aspectos clave de la Declaración de Principios de la CMSI incluyeron lo siguiente:

 La Declaración reconoce que las TICs son el fundamento esencial de una Sociedad de la Información sin exclusiones.

 Se subraya la necesidad de reforzar el marco de confianza en las TICs.

 Las TICs también son instrumentos importantes de buen gobierno.

 Si el acceso universal es el fundamento de la verdadera Sociedad de la Información, la creación de capacidades es su motor.

 También reconoce que hay que dar recursos a los grupos marginados y vulnerables para que adopten estos principios y tengan la posibilidad de actuar.

 La Declaración reafirma la universalidad e indivisibilidad de todos los derechos humanos y las libertades fundamentales de la Sociedad de la Información, así como la democracia y el buen gobierno.

 En lo que hace a la propiedad intelectual, la Declaración destaca la importancia de fomentar la creatividad y las innovaciones, y la necesidad de compartir los conocimientos para impulsarlas.

 Entre los principios fundamentales también figura el respeto de la diversidad cultural y lingüística, las tradiciones y las religiones.

 En cuanto a la gestión de Internet, se insiste en que todos los actores y las organizaciones intergubernamentales aborden los asuntos técnicos y de política pública. Y se acordó establecer un Grupo de Trabajo sobre la Gobernanza de Internet.

 También se reafirman los principios de libertad de prensa, independencia, pluralismo y diversidad de los medios de comunicación.

 Por último, la Declaración expresa el apoyo incondicional al compromiso de colmar la Brecha Digital mediante la cooperación internacional de todos los actores.


VII.- Conclusiones

Es en razón de lo expuesto que podemos afirmar con certeza que la irrupción de la Sociedad de la Información ha introducido profundos e irreversibles cambios en la manera de llevar las relaciones internacionales:

 El medio en que desarrollan sus actividades las cancillerías, ya no es el mismo. En el mundo de la Sociedad de la Información, las fronteras tienden a desaparecer y surgen hoy nuevos actores en escena como lo son el Sector Privado y la Sociedad Civil, cambiando el esquema clásico en que operan las cancillerías, y las relaciones internacionales en general, incorporando nuevos puntos de vista y requerimientos a los procesos de negociación. Esto conlleva necesariamente a una nueva dimensión en las relaciones entre naciones, propia de la globalización y que representa un serio desafío para las cancillerías, por cuanto surge la necesidad de buscar soluciones globales a problemas que anteriormente podían ser resueltos entre naciones.

 En las oportunidades y herramientas que se ofrecen para el mejor desarrollo de sus tareas, pues resulta evidente que los cambios tecnológicos facilitan el acceso y análisis de la información, afectando directamente la rapidez evolutiva de los procesos de carácter internacional en que las Cancillerías deben intervenir. De ahí que se requiera un mayor dinamismo en la actividad diaria y la capacidad de respuesta de parte de nuestras cancillerías que les permitan llevar el nuevo ritmo de esta Sociedad de la Información.

 Incorporando un carácter cada vez más técnico en las negociaciones e interacción con organismos internacionales especializados,

De esta manera, entendemos que la necesidad de lucha para eliminar la brecha digital entre países ricos y pobres afecta la labor de nuestras cancillerías en diversas dimensiones, imponiéndoles nuevos retos y desafíos en los procesos de negociación, en la capacidad de interactuar y buscar alianzas con nuevos actores y en la posibilidad de trabajar de forma complementaria con los órganos de carácter cada vez más técnico, de manera de obtener un desempeño integral tal y como ha resultado ser el Proceso de la Cumbre Mundial sobre la Sociedad de la Información, tanto en su primera como en su segunda fase.

Finalmente, es necesario señalar que durante la Segunda Fase de la Cumbre Mundial sobre la Sociedad de la Información se debe avanzar en el perfeccionamiento de estos nuevos paradigmas y planes de acción para el logro de objetivos concretos, cumpliendo de esa manera el mandato de Naciones Unidas, teniendo siempre en mente en el cumplimiento efectivo de las Metas del Milenio.